Es evidente que durante la semana comprendida entre el 20 y el 24 de junio (2016) el principal “Driver” del Mercado ha sido el “Brexit”, cuyos resultados preliminares durante la jornada en que se llevara a cabo dicho referéndum, el jueves 23 de junio, se mantuvieron con un diferencial marginal, al grado que diversos agregados económicos -incluidas empresas encuestadoras, analistas y las propias Calificadoras de Riesgo- daban por descontado que el Reino Unido permanecería dentro de la Unión Europea, sin embargo y pese a todos los pronósticos, el veredicto final favoreció el “NO” consolidándose entonces el “Brexit” o salida del Reino Unido de la Unión Europea. No obstante lo anterior, tras haber sido tomada la decisión que pareciera no tener marcha atrás, surge el denominado #Bregret mediante Redes Sociales, que es una combinación de “Britain y regret” y que constituye el pronunciamiento de más de 2.7 millones de británicos respecto a un segundo referéndum que decida definitivamente si Reino Unido permanece o no como estado asociado de la Unión Europea, pues se considera que 52% de los votos con los que se impuso el “Brexit” es un margen demasiado estrecho, por lo que la solicitud radicada en el Sitio Web del Parlamento británico y, tras darse a conocer los resultados del referéndum del jueves, incrementó considerablemente el número de firmas superando los 2.5 millones el lunes 27 de julio (2016), sin embargo, es oportuno destacar que si bien la solicitud está planteada ante el Parlamento británico, no existe garantía de que sea atendida, por lo que será oportuno dar seguimiento al desenlace de este dilema económico, político y social que si bien ha tenido lugar en el Reino Unido, es un realidad que afectara significativamente las condiciones generales del entorno de la Unión Europea y global, en el entendido que será el sucesor de David Cameron quien se haga cargo de las negociaciones correspondientes, pues como es del dominio público, Cameron ha presentado su renuncia al cargo tras confirmarse los resultados del referéndum, el cual sin duda ha empezado a cobrar factura al Reino Unido, toda vez que su calificación crediticia se ha visto afectada negativamente –entre otras cosas- derivado del periodo de inestabilidad que supone la eventual caída de las exportaciones, las cuales hasta antes del “Brexit” tenían como destino principal la Unión Europea, situación que también puede afectar negativamente la inversión productiva en el Reino Unido, explicando lo anterior la razón por la cual la Libra Esterlina se depreció más del 10% en unos cuantos minutos tan pronto como se dio a conocer el resultado del referéndum, alcanzando niveles mínimos históricos no vistos desde la década de los 80´s, marcando un Low en torno a 1.3225 Dólares por Libra, para cerrar la jornada del viernes 24 de junio (2016) en torno a 1.3700, nivel inferior al Low registrado durante la “Crisis Subprime” en 2009. José Luis Lecona Roldán, MBA y Money Manager de FX Global Management, LLC, autor del libro “El Manejo de Capitales en el Siglo XXI” -1ra y 2da Edición-. Fuente: Artículo JLLR, IMEFI