LOCAS POR EL MAMBO es una inspiración del maestro Damaso Perez Prado. {This video was shot 50 years ago.} Aquí verán ustedes a Amalia Aguilar y sus bailarinas y al cantante Yeyo Cane. Perez Prado introdujo el rítmo del mambo en la provincia de la Habana alrededor del 1938 antes de irse de viaje a Nueva York. Para vencer cualquier resistencia al nuevo ritmo, a Perez Prado se le ocurre la idea de añadirle un sabor de jazz al estilo de Stan Kenton y Dizzy Gillespie. Es así que el mambo cambia de un formato de conjunto al formato de una grán banda con 4 sáxofones, 4 trompetas, piano, bajo, maracas, tumbadora, timbales y el resto de los hierros. Perez Prado hizo hincapie en el destaque de este instrumento, que junto con los sáxofones a la manera del Jazz norteamericano, forma un enlace melódico nunca antes obtenido. El resultado fué una mezcla de jazz y rumba pero con un compás más marcado y más rítmico. Debido a restricciones impuestas por la Asociación de Músicos de Estados Unidos, cuando Pérez Prado hizo su contrato con la RCA, el exigió contratar los mejores músicos norteamericanos y mantener la sección de percusión en manos de negros cubanos. Los siguientes músicos famosos se pasearon por la orquesta del Rey del Mambo; Benny Moré, Johnny Pacheco, Mongo Santamaría, René Bloch, Patato Valdez, Cándido, Ray Barreto, Maynard Ferguson, Shorty Rogers, Doc Severinsen, etc. A Pérez Prado se le conocia como El Rey del Mambo. Las siguientes orquestas se unieron al furor del mambo; Machito y sus Afro-cubanos, Tito Puente y su banda, Tito Rodriguez y su banda, y muchos más. Pérez Prado paseó el mambo por el mundo entero. El rítmo se desarrolló gracias al esfuerzo de varios músicos, pero lo perfeccionó el Rey del Mambo, Dámaso Pérez Prado.