La inmigración en Alemania alcanzó en 2013 el mayor nivel de los últimos 20 años. Más de 1.226.000 personas llegaron al país, sobre todo en busca de trabajo. Especialmente en países en crisis del sur de Europa como España, Italia o Grecia es muy difícil encontrar una plaza de formación profesional o un puesto de trabajo. Aquí, las cuotas de desempleo juvenil sobrepasan a veces el 50%.